Los huevos aptos para el consumo humano se denominan huevos de categoría A o huevos frescos. Pueden consumirse como huevos en cáscara o una vez transformados en ovoproductos.
Solo pueden venderse para consumo humano huevos sin romper, incubar o cocer. Se consideran «huevos rotos» los huevos que tienen roturas en la cáscara y membranas, con exposición de su contenido. Los «huevos incubados» son los huevos fértiles que han sido introducidos en una incubadora.
La normativa de comercialización comunitaria establece las características que deben cumplir los huevos de categoría A, que tienen:
a) Cáscara y cutícula de forma normal, limpias e intactas;
b) Cámara de aire de altura no mayor de 6 milímetros; salvo en el caso de los huevos que se comercialicen con la indicación «extra», en los que no podrá ser superior a 4 milímetros;
c) Yema visible al trasluz solo como una sombra, sin contorno claramente discernible, que se mueva solo levemente al girar el huevo y al volver a colocarlo en una posición central;
d) Clara transparente y traslúcida;
e) Desarrollo imperceptible del germen;
f) Sin materias ni olores extraños.
Los huevos frescos no pueden lavarse o limpiarse antes ni después de su clasificación, ni someterse a tratamientos de conservación ni a refrigeración en locales o plantas donde la temperatura se mantenga artificialmente a menos de 5 °C. No se consideran refrigerados los huevos que se han mantenido a una temperatura inferior a 5 °C durante un transporte de duración no superior a 24 horas, o en locales de venta al por menor durante un plazo máximo de 72 horas.
Se clasifican como de categoría B los huevos que no cumplen las características de los huevos de categoría A.
Los huevos de categoría A se pueden clasificar para su venta por peso en cuatro clases:
a) XL, súper grandes: peso ≥ 73 gramos;
b) L, grandes: peso ≥ 63 gramos y < 73 gramos;
c) M, medianos: peso ≥ 53 gramos y < 63 gramos;
d) S, pequeños: peso < 53 gramos.
Si en un mismo estuche se envasan huevos de categoría A de distintos tamaños, se indica el peso neto mínimo de los huevos en gramos, y se pondrá en una de las caras exteriores del estuche las palabras «huevos de tamaños diferentes» o términos equivalentes.